Para empezar este viaje hacia lo que yo
considero que nos da aire para continuar persistiendo en el éxito profesional y
el logro de los sueños, traigo a colación el artículo de Alejandro Acosta, “Por
qué los buenos proyectos fallan de todos modos”, en el cual menciona la
metodología llamada “Iniciativas de rápido resultado”, que consiste en
introducir a un proyecto, equipos de
trabajo orientados al logro de metas a corto plazo, que vayan sumando al
resultado final.
Esta metodología busca que los participantes
en un proyecto, estén continuamente motivados, ya que constantemente están
logrando pequeñas victorias y esto los ayuda a seguir adelante con el mismo
ánimo con el que comenzaron.
Sobre todo cuando se emprenden proyectos
de envergadura, no necesariamente grandes, pero si que se inician con el
convencimiento que van a transformar el mundo, que van a transformar nuestra
propia vida, que van a ayudar a miles de personas, nos vamos a encontrar con
grandes barreras, con inmensos obstáculos que nos invitan a dejarlo todo, a no
continuar, a cambiar rápidamente de rumbo porque simplemente seguir está muy
difícil.
Es ahí donde las victorias tempranas
juegan un papel muy importante, entender y apreciar que estos pequeños logros,
sin duda, hacen parte del resultado final, que hoy se tiene más de lo que se
tenía ayer, que hoy se está un poco más cerca de la meta, de hacer de nuestro
emprendimiento algo que ya hace la diferencia; disfrutar no solamente del
resultado final sino también del camino que nos conduce a lograrlo, y de esas
pequeñas ganancias que se van dando a punta de trabajo duro, inspiración y
mucha persistencia.
Quiero traer algunas experiencias reales,
que ilustran el impacto de las victorias tempranas en la implementación de los
proyectos empresariales.
En este Blog, en el que estoy publicando
este artículo, que hace parte de un “Onestopsite” llamado Inntegrity, en el
cuál hemos venido trabajando durante un poco más de seis meses, en ocasiones
nos preguntamos, hacia donde vamos? Que estamos logrando? Realmente vale la
pena?. Y es aquí donde aparece la desilusión, el desconcierto, la idea de
abandonarlo todo de una buena vez; pero es en este punto donde vienen la
victorias tempranas.
Cuando iniciamos, el hecho de que
tuviéramos veinte lectores era un gran logro, que veinte personas se
interesaran en nuestras publicaciones, era gratificante, nos animaba, nos
mostraba la vida de otro color. Hoy ya hemos avanzado y las publicaciones las
leen más de 300 personas, incluso hay una de ellas que ya alcanzó los 500
lectores y seguimos disfrutando de manera enorme cuando superamos esta cifra.
Ya los artículos han tomado tanta fuerza,
que han sido publicados en Notinet, publicación impresa que llega a miles de empresas
en Colombia.
Hoy
por hoy los contenidos ya no solamente se leen en Colombia, han trascendido
nuestra frontera y actualmente cubrimos países como España, Estados Unidos,
Argentina, México, Rusia, Venezuela, Ecuador e Inglaterra.
Hoy hemos agregado un nuevo personaje a
Inntegrity, se llama “Nicanor el emprendedor”, nuevamente es muy satisfactorio,
encontrar que este personaje tiene cada vez más adeptos, se ha vuelto una
fuente de consulta, y esto es una victoria temprana que nos impulsa a seguir
reinventándonos, a seguir innovando, a seguir siendo muy rigurosos en nuestro
trabajo.
Estamos disfrutando cada nuevo lector, y
seguramente con calidad en nuestros contenidos y persistencia, vamos a llegar a
tener una gran comunidad.
Cuando a nuestro sitio a través de
Twitter, Facebook, LinkedIn, Instagram o directamente en el blog, nos llega un
nuevo seguidor, esto es la gloria, nos motiva a hacerlo cada vez mejor y a
convencernos que estamos haciendo un importante aporte a la humanidad.
En mi trabajo con grandes compañías en
Colombia, que deciden medir su ambiente laboral, mi recomendación es que para
empezar el proceso de construcción de un gran lugar de trabajo, es importante
lograr victorias tempranas, la razón es que cuando se desarrollan este tipo de
mediciones, se generan expectativas, en este orden de ideas, es importante ir
consiguiendo logros, ya que las personas empiezan a evidenciar el interés de la
compañía por los empleados, y esto forma una espiral ascendente que impulsa a
todos en la organización a poner lo mejor de si y a comprometerse con la
transformación del lugar de trabajo.
Quiero concluir, recomendando apreciar las
victorias tempranas, no solo en proyectos y en emprendimientos sino también en
las actividades que desarrollen en su vida personal, profesional y laboral.
Las victorias tempranas, son un gran
aliciente, motor del emprendimiento, y oxigeno en el desarrollo de grandes
proyectos empresariales.
Oscar Javier Jiménez Yepes
MBA Universidad Javeriana
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oscar.jimenez@greatplacetowork.com
